El Jardín de Los Monos
Cada noche, en el jardín, huele a jazmines y a pescado frito. Y a la luz de los faroles de papel todos se reunen alegres y vibrantes como cuerdas de un instrumento. Los callejones sucios y oscuros que conducen al jardín están poblados de gatos y niños que ven en la oscuridad. Hace calor como si fuera de día.
Hay una mesa de mariquitas engominadas y con camisas blancas, que acaban de cenar y rien a carcajadas y se abanican con lo que pillan. Su lider, que se depila con cortacesped, no me quita ojo de encima. Yo me hago el despistado y cuela.
La azafata de aviones guiri, gorda, rosa y soñolienta como un manatí, se duerme borracha sobre la barra y sueña que mastica algas a la deriva.
Al lado bebe el grupo de las niñas, que eso parece una marisquería. Son modernas y bolleras, da gusto hablar con ellas, y entre todas, las mejores son:
La morena (más ancha) de pelo corto que vale su peso en perlas y piedras preciosas y que no dice una cosa sin que todos se mueran de risa; y la alemana, o rusa o de no se donde, que es tó guapa mu fina y habla malagueño profundo con acento metálico de la selva Negra ; Le estira amorosamente las camisas con la plancha a la primera .
La gitana que fue el modelo de Jean-Paul Gaultier mas guapo que he visto en mi vida, va saludando a todo el mundo, yo le sueno.
Una experta en feng shui que tiene un huerto en Almería escucha a un cotizadisimo pintor de cierta edad que le explica sus visiones geniales con los ojos de un niño.
A su lado, bosteza el amante que parece un ex-actor porno y le encanta hablar con sus perros, observa como una walkyria de dos metros saca los colores con una palmada en el culo de intensidad vikinga a un (tímido)cisne negro, mi amigo de clase ,hibrido de Jerez y Asturias, que se mueve como un junco y tiene ojos de odalisca.
Está una sonriente monitora de aerobic que no se calla ni debajo del agua y resplandece en la oscuridad. Se ha levantado para explicar una cosa a la madre de todas las culturistas, una uruguaya con el abdomen como una tortuga incrustada.Lorenator.
La prima uruguaya de visita de Lorenator, que está salida como una perra y parece un espinete oxigenado mete caña a un abogado melancólico en un rincón, de bronceado fluorescente, que pasa de ella porque está enamorado del Cristo del Gran Poder y no sabe qué hacer.
En la mesa de al lado, un azafato noruego exhibe a sus amigas borrachas su souvenir español.
Son amenizados por la vieja loca que baila la música del Bershka, Lola, que gracia tiene.
Uno que ha entrado en el jardín solo, andando como un cowboy y se ha apoyado en la barra , ignorando la manatí. Huele a cuero, es irresistible y lo sabe.
Lo sigue uno que ha probado todas las cremas del cosmos,algo despigmentado tras el proceso, neurótico, dulce y preciado como un pato mandarín, al que una gótica (delicada, dura y lunar) le ha preguntado si ha visto a alguien. El otro le ha contestado no se qué y se mueren de risa.
Las rubias primas de alguien ,ya doradas por el sol, se exhiben como sirenas sonrientes mientras esquivan a una gitana de cinco años, que llama a gritos a Nazaret, desde el fondo del cuello, con la voz de un hombre de cuarenta y cinco.Les pide un cigarrillo.
Un pintor de San Francisco que parece la portada del Men´s health (y con el que me he acostado, si, solo yo, unas cuantas veces)sentado solo en una mesa: ojalá me esté esperando a mi..., pero parece que no, porque han llegado el sueco y el de Granada, el de los ojos verdes. Ay!
Pasa la señora del bolso, moviendo el culo; mete tripa: se ha engordado un poco.
Un pequeño ejemplar ibérico, que tiene toda la gracia, y se marchó a Madrid, acaba de entrar riéndose con otro bajito de su misma cuerda, buscando al rubio y al cowboy.
Un kinky aulla acompañado con su guitarra y encima quiere una moneda.
Las viejas del estanco. Yo creo que son bolleras.
Ahora pasa la del Body Chop , con Su Fransihco del brazo, y sus niños: Su Fransihco Jozé y Su Sofi que tiene el pelo por debajo el culo y va al inglés, al ballet, a la infromática, al violin y a las sevillanas; y las niñas de mi clase: la cheerleader (Macarena de California), la morena (La Lore), y la fina de Marruecos (La Ikram) y las otras, que esto es miss España...
Cuanto echo de menos el Jardín de los Monos... si volviera, ¿sería igual?
Cada noche, en el jardín, huele a jazmines y a pescado frito. Y a la luz de los faroles de papel todos se reunen alegres y vibrantes como cuerdas de un instrumento. Los callejones sucios y oscuros que conducen al jardín están poblados de gatos y niños que ven en la oscuridad. Hace calor como si fuera de día.
Hay una mesa de mariquitas engominadas y con camisas blancas, que acaban de cenar y rien a carcajadas y se abanican con lo que pillan. Su lider, que se depila con cortacesped, no me quita ojo de encima. Yo me hago el despistado y cuela.
La azafata de aviones guiri, gorda, rosa y soñolienta como un manatí, se duerme borracha sobre la barra y sueña que mastica algas a la deriva.
Al lado bebe el grupo de las niñas, que eso parece una marisquería. Son modernas y bolleras, da gusto hablar con ellas, y entre todas, las mejores son:
La morena (más ancha) de pelo corto que vale su peso en perlas y piedras preciosas y que no dice una cosa sin que todos se mueran de risa; y la alemana, o rusa o de no se donde, que es tó guapa mu fina y habla malagueño profundo con acento metálico de la selva Negra ; Le estira amorosamente las camisas con la plancha a la primera .
La gitana que fue el modelo de Jean-Paul Gaultier mas guapo que he visto en mi vida, va saludando a todo el mundo, yo le sueno.
Una experta en feng shui que tiene un huerto en Almería escucha a un cotizadisimo pintor de cierta edad que le explica sus visiones geniales con los ojos de un niño.
A su lado, bosteza el amante que parece un ex-actor porno y le encanta hablar con sus perros, observa como una walkyria de dos metros saca los colores con una palmada en el culo de intensidad vikinga a un (tímido)cisne negro, mi amigo de clase ,hibrido de Jerez y Asturias, que se mueve como un junco y tiene ojos de odalisca.
Está una sonriente monitora de aerobic que no se calla ni debajo del agua y resplandece en la oscuridad. Se ha levantado para explicar una cosa a la madre de todas las culturistas, una uruguaya con el abdomen como una tortuga incrustada.Lorenator.
La prima uruguaya de visita de Lorenator, que está salida como una perra y parece un espinete oxigenado mete caña a un abogado melancólico en un rincón, de bronceado fluorescente, que pasa de ella porque está enamorado del Cristo del Gran Poder y no sabe qué hacer.
En la mesa de al lado, un azafato noruego exhibe a sus amigas borrachas su souvenir español.
Son amenizados por la vieja loca que baila la música del Bershka, Lola, que gracia tiene.
Uno que ha entrado en el jardín solo, andando como un cowboy y se ha apoyado en la barra , ignorando la manatí. Huele a cuero, es irresistible y lo sabe.
Lo sigue uno que ha probado todas las cremas del cosmos,algo despigmentado tras el proceso, neurótico, dulce y preciado como un pato mandarín, al que una gótica (delicada, dura y lunar) le ha preguntado si ha visto a alguien. El otro le ha contestado no se qué y se mueren de risa.
Las rubias primas de alguien ,ya doradas por el sol, se exhiben como sirenas sonrientes mientras esquivan a una gitana de cinco años, que llama a gritos a Nazaret, desde el fondo del cuello, con la voz de un hombre de cuarenta y cinco.Les pide un cigarrillo.
Un pintor de San Francisco que parece la portada del Men´s health (y con el que me he acostado, si, solo yo, unas cuantas veces)sentado solo en una mesa: ojalá me esté esperando a mi..., pero parece que no, porque han llegado el sueco y el de Granada, el de los ojos verdes. Ay!
Pasa la señora del bolso, moviendo el culo; mete tripa: se ha engordado un poco.
Un pequeño ejemplar ibérico, que tiene toda la gracia, y se marchó a Madrid, acaba de entrar riéndose con otro bajito de su misma cuerda, buscando al rubio y al cowboy.
Un kinky aulla acompañado con su guitarra y encima quiere una moneda.
Las viejas del estanco. Yo creo que son bolleras.
Ahora pasa la del Body Chop , con Su Fransihco del brazo, y sus niños: Su Fransihco Jozé y Su Sofi que tiene el pelo por debajo el culo y va al inglés, al ballet, a la infromática, al violin y a las sevillanas; y las niñas de mi clase: la cheerleader (Macarena de California), la morena (La Lore), y la fina de Marruecos (La Ikram) y las otras, que esto es miss España...
Cuanto echo de menos el Jardín de los Monos... si volviera, ¿sería igual?
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