Emphermo


Bufff, estaba harto del post anterior. Les he cogido un poco de manía a esas chicas, pero como he estado TAN enfermo este fin de semana, que llevo cinco días de arresto domiciliario, amargado y resentido como Clara, pero sin una Heidi a la que manipular y aplastar su espíritu, pues no tenía ganas de escribir nada, y de youtube ya he abusado.

Lejos de entrar en detalles sobre lo que implica un virus digestivo (o una bacteria), lo único que os diré es que os abriguéis bien y que cuidéis lo que coméis ( y con ello no quiero decir nada que no parece que digo), porque yo estoy totalmente devastado y , algo que quizás alegre a algunas personas, he perdido mi célebre belleza PARA SIEMPRE.

Aunque mi compañero de trainning dice que me recuperaré en una semana. Pero esto es un baipass (?) en mis planes de entrenamiento. Pensar en el camino desandado me deprime y al mismo tiempo me impulsa a recuperarme pronto y resurgir de mis cenizas...lo cual me ha hecho descubrir que soy complejo.

Bueno, estos días al menos me han permitido ver horas y horas de televisión. Hasta el punto de que tenía que apagarla porque me molestaba (!) por primera vez en mi vida. Como gracias al cable ya no solo tengo canales plebeyos, como vosotros, he podido ver un montón de pelis viejísimas , y series , documentales, videos musicales y dibujos. Se me ha ocurrido una secuela para Pejota. Una historia de suspense (gracias a Calle 13, el canal) en la que mueren algunas amigas suyas y empieza a investigar el caso Jessica Fletcher la de se ha escrito un crimen, que en realidad es una de esas mujeres que tienen un clitoris gigante como un pene y la voz super ronca, y los agentes de policía la respetan, y la llaman señor. Pues la Sra. Fletcher descubre que Pejota estaba hipnotizando con un medallón egipcio maldito a Rhona para que cometiera los espantosos asesinatos y Pejota y la Señora Fletcher firman un pacto de silencio a cambio de que Pejota sea la esclava sexual de Jessica Fletcher un fin de semana al mes para siempre. Pero la idea es un poco floja y la verdad no me apetecía más que inventarme el argumento.

Y para terminar,si queréis oir una ironía cruel: como mi amigo Predator 1 ya me hizo notar, Raquel Bollo se ha puesto gafas. De pasta con un cordón y todo.